Mega torres de Córdoba y Corrientes: mañana día clave

Finalmente mañana (martes 2 de julio) a las 12hs en el Concejo Municipal se define el futuro de un sector importante del microcentro de Rosario. Como suele ocurrir cuando se trata de los intereses de los más poderosos, tres comisiones se reunirán en simultáneo para darle tratamiento al mega emprendimiento y que salga en la última sesión antes del receso.

Desde que llegó, hace un año, el pedido de triplicar la altura de construcción permitida en el área para hacer 3 mega torres de alta gama, (una de 90mts, otra de 60mts y otra de 40mts) cuando a cualquier empresario pyme solo se le permiten 23mts, desde Ciudad Futura planteamos que queríamos que se construya en el sector pero con un criterio distinto. Que la ciudad tenía una gran oportunidad para debatir cómo revitalizar el área central, cómo redistribuir las plusvalías urbanas, cómo generar políticas para los inquilinos, para los que no pueden tener una vivienda propia, etc. Es decir: cómo generar un proyecto donde gane el privado pero también gane la ciudad. Fueron en vano todos los intentos por debatir seriamente el tema. Presentamos una contra propuesta proyectual y urbanística que nunca fue siquiera sometida a debate en ninguna comisión y así la ciudad, es decir todos nosotros y nosotras, perdimos otra oportunidad de hacer algo que realmente le sirva a la gente.

Pasó lo que pasa siempre, con estos concejales y estas instituciones
Después de más de una año de no debate, de perder oportunidades, finalmente mañana será aprobado por supuestas “modificaciones” que se le hicieron al proyecto. “Modificaciones” de forma, tecnicismos para poder decir que no sale todo tal cual como lo pidió el mega empresario sino que el Concejo trabajó en alternativas. Mentira. Lo que se hizo fue bajar unos metros la altura y sumarle esos mismos metros en mayor edificabilidad hacia los laterales. Es decir, el proyecto sigue siendo el mismo: un negocio que solo sirve para maximizar la ganancia de un empresario por sobre el resto de los constructores de la ciudad y sin tener ningún beneficio serio para Rosario.

Por eso desde Ciudad Futura siempre insistimos con los mismo, a cada NO que decimos, le ponemos un SI, siempre una contrapropuesta. Y como casi nunca son tomadas en cuenta reafirmamos que con esta clase política y con estas instituciones muy difícilmente se puedan abordar los problemas que la ciudad tiene. Este Concejo no debate nunca cómo empezar a abordar la desigualdad y la violencia, nunca debate políticas urbanas para poder acceder a los derechos básicos de la ciudad, si debate cómo hacer más ricos a los que ya lo son.

Por lo menos que no haya corrupción
Por eso mañana llevaremos una última propuesta para incorporar a la inminente aprobación de este fenomenal negocio para pocos: para que por lo menos no tengamos dudas de la razones por las cuales votan los concejales y darle un poco de transparencia al proceso de decisión. Por un lado vamos a proponer en la comisión conjunta del día de mañana que junto con la aprobación de la torres se apruebe un proyecto Anti Corrupcion para que durante el plazo de 10 años de construído se envíen al Concejo quiénes son los titulares de los inmuebles de las mega torres. De forma tal de evitar que algún funcionario público que haya tenido que ver con la decisión de aprobar esas torres termine mágicamente con un departamento en las mismas. Este mecanismo creemos que se tiene que repetir en todo gran emprendimiento que dependa de una decisión política de cambio de normativa.

Además, queremos que se incorpore el mecanismo de “doble lectura”, como ya tienen ciudades como córdoba. Para que ante decisiones importantes del Concejo que tienen un gran impacto en la ciudad, los proyectos que se aprueban una vez, tengan luego que pasar por un período de 15 días donde la ciudadanía participa y opina. Y que una vez enriquecido por ese proceso, se tenga que volver a votar y aprobar. De ese modo se evitan acuerdos bajo la mesa y se garantiza la participación popular.

En síntesis, Rosario perdió otra oportunidad de apostar por un modelo de crecimiento diferente, que no reproduzca la desigualdad y planteé inicios de soluciones a los grandes problemas que tiene. El Concejo, una vez más, simuló que debatía, simuló que escuchó a las organizaciones ambientalistas y sociales que se movilizaron y terminó simulando una modificación para justificar por qué después de más de una año el proyecto sale igual a como entró. Desde Ciudad Futura presentamos alternativas concretas para revertir la situación, pero no encontramos demasiados aliados adentro. Por eso mañana llevaremos nuestras razones y más propuestas para seguir transparentando las cosas que pasan en una institución que ya no representa a casi nadie.